EQUIPAMIENTO EDUCATIVO (CEIP C2)

EL EJIDO (ZONA ALMERIMAR), ALMERÍA

El solar en el que debe levantarse la nueva construcción, se ubica a medio camino entre un tejido urbano de vivienda en bloque abierto en torno a numerosas zonas verdes al Sur, y una vasta extensión de invernaderos que define el paisaje urbano y territorial de El Ejido al Norte. Una carretera separa los invernaderos de la Nueva zona de Almerimar, y en el cruce viario que da acceso al SUMPA-4-SM (Ensenada de San Miguel), se implantan las parcelas EE1 y EE2, como equipamientos docentes de dicha actuación. Con forma longitudinal y una suave pendiente en su eje longitudinal, la implantación de la edificación queda condicionada por orientación, la proximidad de una banda peatonal y otra ajardinada que actúa de colchón frente a la carretera y la condición de partida de la modularidad y el crecimiento por fases de la intervención.

Dado el escaso frente de acceso rodado que presenta la parcela así como su longitudinalidad, proponemos una implantación de la edificación cercana al acceso rodado, de forma que puedan organizarse conjuntamente los accesos rodados y aparcamientos así como la entrada principal al recinto, dejando al extremo Este de la parcela la ocupación de las pistas polideportivas y el pabellón, de forma que el crecimiento del edificio se efectúe en el sentido Este-Oeste.

De este modo, el edificio queda organizado con una zona central en planta baja que organiza las dotaciones comunes y segrega los recorridos de las zonas de infantil y primaria, proponemos un esquema de galería abierta de modo que todo el aulario tenga orientación norte y las propias galerías actúen de espacio colchón a la orientación Sur. De este modo queda organizado el edificio mediante dos crujías paralelas conectadas con una banda de circulaciones y espacios de relación centrada y que generan dos zonas abiertas relacionadas directamente con el espacio abierto y las zonas comunes.

Proponemos un esquema de tipo longitudinal, de modo que la edificación ofrezca un frente que permita imponer cierto orden y controlar de forma decidida el “desorden” urbano y la multiplicidad de distintas situaciones que ocurren en su perímetro. El edificio recoge el eje mas largo del solar y se articula en torno a él, librando dos franjas de espacio libre a ambos lados de su implantación central, relacionadas con los espacios centrales libres entre las crujías-galerías.

Al contemplar la primera fase prácticamente la totalidad de los espacios comunes y de administración, proponemos que éstos ocupen una posición centrada en el edificio longitudinal del centro de modo que puedan organizar dos zonas bien diferenciadas; la planta baja con el aulario infantil y la planta primaria con el aulario de primaria.

Dos volúmenes se desprenden del prisma principal del edificio y acotan y señalan el atrio principal del acceso al edificio, el comedor y cocinas con acceso directo desde el exterior y la zona de dirección y secretaría, articulando un vacío central en el edificio, el cual, voluntariamente sobredimensionado, se ofrezca con una fuerte escala pública e institucional, en contraste con la fragmentación y a la falta de unidad del entorno próximo.